" Señor concédeme serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, valor para cambiar las que si puedo y sabiduría para distinguir la diferencia."

martes, 5 de octubre de 2010

Igualdad, igualdad!

Igualdad, linda palabra que todos deseamos de alguna manera, todos queremos que haya igualdad entre las personas, igualdad de genero, igualdad social, que no haya racismo, que no haya pobreza!, que seamos uno solo… unidos!. Eso es bueno, eso es lo que seria un mundo ideal, en donde las diferencias socioeconómicas no estén tan alejadas de extremo a extremo, donde para ir a un lugar no importe tu color de piel, tu nacionalidad, tu cultura y demás.

Tildamos a la desigualdad como algo injusto y no humano, queremos igualdad a como de lugar… pero así como tanto la exigimos así mismo muchas veces somos los que hacemos que no exista, pero… ¿como es esto?... Bueno…  aquí les dejo algunos ejemplos:

Clamamos igualdad social, somos los primeros que cuando muchas veces nos invitan a ciertos lugares en donde habrán personas de mas “baja categoría” que nosotros decimos: “ayyy noooo, para allá no… hay muchos (chopos)…”

Clamamos igualdad de genero… pero eso es a conveniencia ya que las mujeres que tanto lo exigen piden la igualdad en ciertos casos y en otros no… y el hombre por igual ya que este supone que la mujer debe hacer todo lo del hogar cuando no es así, entre otros ejemplos.
 
Clamamos igualdad de derechos
pero cuando vamos a un banco, hospital, establecimiento cualquiera y vemos que hay una fila… no respetamos el derecho del otro y nos la buscamos como podamos para que nos pongan delante, entre otros.

Clamamos igual oportunidades para todos… pero esta se da cuando cada persona tiene el mismo acceso a ciertos bienes sociales o económicos…  conozco personas que no van a lugares donde hayan personas de color, muchas veces no queremos que personas de una clase social mas baja que la nuestra asista o este en lugares donde estamos, muchos no quieren que sus hijos estudien con pobres, que no se relacionen con estos, entre otros.

Y como estos muchos pero muchos ejemplos más…  se que para cada uno de estos ejemplos mencionados en esta nota hay una critica o reclamo del porque no es así y que no es la mayoría que lo hace… eso lo se… no es la mayoría, pero en mi opinión al menos una vez en nuestra vida hemos exigido igualdad en algún aspecto que nosotros mismos después no la queremos, si lo analizamos… la sociedad y nosotros como parte de ella justificamos algunas manifestaciones de la desigualdad y condenamos otras… como mencione anteriormente… “tildamos a la desigualdad de injusta”… pero... ¿es esta en realidad para nosotros en todos los casos injusta?.

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